Pionero en el tejido tecnológico de La Rioja, nuestro padre, compañero, presidente y fundador de EMESA, nos dejó tristes y con un vacío enorme en un momento muy duro, al inicio de la pandemia en marzo del 2020, donde las circunstancias no ayudaron para poder despedirse de esta gran pérdida como se merecía.

Eduardo Solar Quintana fundó Emesa en 1982, sus pasos han sido muy importantes en el sector. Líder, visionario, pionero, pero sobre todo gran persona. Su pasión por el trabajo y el servicio al cliente es el mayor legado que ha dejado a sus hijos Alberto y Eduardo, que han seguido su trayectoria y han contribuido en consolidar EMESA como una empresa de referencia en el mercado.

La vinculación total de EMESA con los partners líderes del sector tecnológico, como HP (primer fabricante mundial de soluciones informáticas), fue algo que hemos heredado de las decisiones que nuestro padre Eduardo Solar Quintana, apostó con gran virtud eligiendo grandes socios tecnológicos y está herencia nos ha marcado para seguir seleccionando la mejor tecnología al servicios de nuestros clientes.

Otro legado que nos ha calado en el buen hacer de nuestro padre, fue el trato con el cliente y la fidelización con pilar fundamental. “La tecnología es importante, pero las personas son indispensables, por eso apostamos por las relaciones duraderas con nuestros clientes, de hecho, algunos confían en nuestros productos y servicios desde el principio”. Asegura Alberto Solar Montoya.